(Des)confinamiento, teletrabajo, rebrote… Son conceptos a los que nos hemos tenido que acostumbrar en los últimos meses y que marcan un momento de máxima incertidumbre en el que la adaptabilidad de las organizaciones a las circunstancias puede ser vital para su supervivencia.
Esta adaptabilidad depende, en gran medida, de su transformación digital. Por eso, los perfiles digitales e innovadores están siendo claves para afrontar los nuevos retos derivados del momento histórico que atravesamos e, incluso, para garantizar que las empresas puedan seguir operando.
Las organizaciones necesitan identificar los perfiles profesionales que les pueden ayudar a llevar a cabo su transformación digital con éxito, en el caso de las compañías más tradicionales, y perfiles capaces de escalar el negocio de los pure player digitales.
Por ello es crítico que las empresas definan nuevos roles dentro de la organización, analizar la situación de mercado e identificar el mejor talento digital necesario y urgente para este cambio si no quieren quedarse fuera de la nueva normalidad que, si es, será digital.
Ciberseguridad y data, entre los principales perfiles en auge
Cada vez son más las compañías que apuestan por reforzar los equipos de ciberseguridad, data y arquitectura de forma interna y anticiparse a riesgos futuros. Asimismo, los perfiles de canales digitales y analítica también están viviendo un crecimiento exponencial, ya que permiten un mayor acercamiento y conocimiento del consumidor final, y les permite ofrecer lo que los clientes demandan y ser ágiles para poder adaptarse a una realidad cambiante.
En el contexto actual, las compañías con una mentalidad digital, reconocen que han transformado sus entornos de trabajo presenciales en remotos con agilidad y rapidez con un incremento de sus ventas en el canal online de hasta un 200%.
Las empresas están priorizando aspectos que antes estaban en segundo plano y han sido capaces de lanzar en pocas semanas iniciativas que, en otro contexto, habrían llevado años.
En opinión de los profesionales, la situación que atravesamos ha demostrado que, si la transformación digital de las empresas ya era importante antes, ahora es crítica. La “nueva normalidad” trae consigo un gran aumento de los negocios online, la necesidad de “securizar” la información y la migración de sistemas a Cloud, entre otros.
La crisis sanitaria está cambiando el hábito y la forma de interactuar del cliente con las empresas. Tanto en España como en el resto del mundo, los consumidores han elevado su nivel de interacción con los canales digitales de sus proveedores, bien a través de la app, web o asistentes virtuales. Por eso, los directivos expertos en transformación digital coinciden: la transformación digital no es solo tecnológica, también de cultura empresarial.