Si algo es cierto, es que este verano está siendo de lo más peculiar. Las calles de las grandes ciudades prácticamente vacías, en las playas hay más mascarillas que sombrillas y encontrar una terraza donde comer algo parece misión imposible. La forma de hacer turismo se está transformando, mucha gente ha vuelto al pueblo a pasar estas semanas de descanso, pero existen otras alternativas como el ecoturismo.
Esta forma de hacer turismo se basa en que las actividades que realizadas tratan de minimizar el daño que puedan provocar los turistas en el entorno natural. Este tipo de turismo se centra más en la ética ecológica que en el disfrute del turista.
Sus principal características es que es untipo de turismo basado en la naturaleza: Estas vacaciones tienen mucho que ver con la concienciación. El objetivo es que los visitantes aprendan a apreciar los entornos naturales y las culturas rurales. Las actividades suelen estar relacionadas con la educación ambiental y aprender a interpretar la naturaleza del lugar. Aunque el fin principal es reducir el impacto negativo que suele provocar el turismo convencional.
El ecoturismo tiene muchísimas ventajas a nivel social, económico y ambiental. Este tipo de turismo promueve la sostenibilidad social ya que ayuda a los habitantes de las zonas rurales. Consigue que se creen comunidades rurales y así mejoran sus condiciones sociales sin cambiar sus tradiciones.
También promueve la sostenibilidad económica; es una manera de apoyar a colectivos desfavorecidos, se crean negocios responsable e incluso se rehabilitan sembrados y huertas que hacía décadas que no se cultivaban.
Por su puesto, promueve la sostenibilidad ambiental; además de hacer que el turismo de masas disminuya, se realizan actividades formativas como la utilización inteligente de los recursos energéticos naturales y no contaminantes, la limpieza de mares y ríos, la no utilización de los dañinos envases de plástico, la concienciación en las prácticas de reciclaje y reaprovechamiento de los objetos cotidianos para darlos una segunda vida útil, etc.
Actividades que se pueden realizar
El ecoturismo es una buena opción tanto para jóvenes, adultos o para familias enteras. El salir del entorno multitudinario de las grandes urbes es muy beneficioso para la salud de todos. Algunas de las propuestas más habituales son las siguientes:
Estancias en hoteles ecológicos; son instalaciones que respetan al 100 % la fauna, la flora, el aprovechamiento del sol, el viento y el agua como recursos energéticos, el aprovechamiento del terreno para crear huertos ecológicos.
Viajes para conocer mejor las tradiciones locales de las zonas rurales: ferias agrícolas, exposiciones de aperos y maquinaria, jornadas de degustación de productos ecológicos de alta calidad, construcción sostenible.
Visitas a granjas sostenibles y ecológicas donde toda la familia pueda descubrir el ciclo vital de los animales de la granja criados en el respeto.
Rutas turísticas con vehículos que ni contaminan ni dañan de ninguna forma el trazado de los viejos caminos y sendas rurales.
Visitas interactivas a huertos ecológicos e instalaciones de permacultura para conocer de primera mano el ciclo vital de los alimentos saludables, ecológicos y de proximidad.
Dónde puedo informarme
Páginas web como Soy ecoturista o el buscador Ecotur, te ayudan a buscar ideas y lugar para pasar unas vacaciones ecológicas.