Desde que apareció el Covid-19 muchas aspectos de nuestra vida han cambiado. El contacto físico es cada vez menor, el teletrabajo se ha instaurado en nuestras vidas y las mascarillas son un imprescindible en nuestro look. Cada vez que aparece la palabra Coronavirus se tiende a relacionar con aspectos negativos, como la crisis sanitaria y económica o la temida palabra confinamiento, que tanto miedo ha dado a lo largo de estos meses. La pandemia que estamos viviendo va a cambiar mucho la forma en la que vivimos. Hemos parado todos y el planeta también ha descansado.
Es evidente que esta pandemia ha traído consigo innumerables problemas a diferentes niveles, pero gracias al parón que ha vivido el mundo los océanos están más limpios, las emisiones de gases cayeron un 17% a nivel mundial y ha habido avances en materia de biodiversidad. Estos tres puntos se encuentran dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible acordados por las Naciones Unidas, en el que no solo están presentes planes de ayuda al medio ambiente sino tambien por la igualdad entre naciones.
La vicesecretaria general de las Naciones Unidas, Amina Mohammed, piensa que la crisis desatada por el virus debe favorecer el impulso de todas las naciones para poder alcanzar las 17 metas acordadas a nivel mundial para 2030, según declaró en una entrevista para Noticias ONU. “Ahora se nos presenta una oportunidad única de aprovechar la crisis para iniciar la Década de Acción para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, declaró la vicesecretaria.
El gran beneficiado de esta crisis ha sido sin duda el medio ambiente. En las ciudades se han vuelto a ver las estrellas por las noches debido a la reducción de desplazamientos y la disminución de la producción industrial. El ODS 13 se basa en la acción por clima y el Covid-19 ha ayudado en este aspecto. Las mediciones de la calidad del aire en ciudades como Madrid y Barcelona mejoraron considerablemente durante el confinamiento. Aún así, no hay que bajar la guardia. La Organización Meteorológica Mundial advierte de que “la reducción de las emisiones como resultado de la crisis económica provocada por el coronavirus, no son sustituto de acciones contra el cambio climático” y temen un aumento de emisiones una vez terminada la crisis. Por ello cuando los Gobiernos se dediquen a reconstruir sus economías desde Naciones Unidas se han propuesto una serie de medidas para favorecer el clima. Las autoridades competentes en la materia insisten el que esto ha sido solo un respiro, pero que hay que seguir luchando.
El océano también se ha tomado un respiro durante esta pandemia. La disminución de residuos expulsados a los océanos ha ayudado a su limpieza. Además, la UNESCO ha aclarado que el océano puede ser un gran aliado contra el Covid gracias a las propiedades de algunas bacterias que habitan en el mar. Por ejemplo, algunas de ellas se han utilizado para realizar pruebas rápidas para la detección del virus. Así, la pandemia también ha estado relacionado con el ODS 14.
Nuestra forma de trabajar ha cambiado. Hace apenas unos meses en España solo el 7% de los trabajadores tenían la opción de hacerlo desde casa cuándo ahora es un 80%. Esta nueva forma de trabajar cuadra muy bien con el ODS 9. Lo que se pretende con esta iniciativa es introducir y promover nuevas tecnologías, facilitar el comercio internacional y permitir el uso eficiente de los recursos. La crisis sanitaria ha acelerado el proceso de digitalización en muchos sectores. Trabajar e ir al colegio ha sido posible gracias a la implantación de estos nuevos sistemas en los que las Naciones Unidas insisten en que hay que seguir trabajando hasta lograr la igualdad de acceso a las comunicaciones entre países para que puedan acceder también a una mejor educación.