Ya no solo irán los consumidores al gigante sueco a comprar muebles, desde ahora Ikea se convierte también en un comercializador de energía eléctrica como Endesa o Iberdrola, pero con la particularidad que su imagen no sufre del desgaste de las grandes energéticas.
El consumidor ya podía comprar paneles solares para iniciarse en el autoconsumo, pero ahora cualquier persona podrá comprar una energía 100% sostenible, en cualquier municipio de españa, gracias a una iniciativa denominada Strömma cuyos primeros test comenzarán el próximo mes de septiembre en Suecia.
La energía comercializada seguirá la filosofía de compañías como Holaluz, tecnológica de energía verde que cotiza en el BME Growth desde noviembre de 2019 y que espera llegar al millón de clientes en 2025 (hoy ya supera los 300.000), en la que los consumidores pueden consumir electricidad renovable asequible procedente de parques solares y eólicos, y conocer sus hábitos de consumo, gracias a una aplicación móvil. Holaluz fue la primera eléctrica europea en conseguir la certificación B Corp.
En Suecia, el consumidor pagará una cuota fija mensual de unos 5 euros mensuales más una tasa variable, en función del volumen de electricidad consumido, un modelo similar al que ya se realiza en nuestro país.
El director de Sostenibilidad de Ikea Suecia, Jonas Carlehed, ha afirmado que “Ikea quiere construir el mayor movimiento de energía renovable junto con compañeros de trabajo, clientes y socios de todo el mundo, para ayudar juntos a abordar el cambio climático, y convertirnos en positivos para el clima para 2030 reduciendo las emisiones climáticas en más de lo que emitimos nosotros mismos, y crear el movimiento de energía renovable más grande del mundo”
