España se encuentra junto con Alemania, Francia y Reino Unido entre los siete países que se han comprometido a dejar de ofrecer ayudas públicas para la financiación en el exterior de proyectos de combustibles fósiles, según ha informado la Agencia EFE.
Esta decisión se ha tomado como parte de la estrategia europea internacional contra la crisis climática. El proyecto se presentó el pasado martes por la coalición «Export Finance for Future», del que además de los países mencionados anteriormente, también forman parte Países Bajos Suecia y Dinamarca. Desde la coalición se pretende que se sigan adhiriendo países a esta iniciativa.
Fue el ministro francés de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, el encargado de presentar el proyecto a la prensa. «Es imperativo cambiar la orientación de la financiación de las exportaciones. Ese dinero tiene que dirigirse exclusivamente a proyectos sostenibles, porque la financiación de las exportaciones es uno de los mecanismos decisivos para luchar contra el calentamiento climático”.
Aún no se ha fijado una fecha concreta para llevar a cabo el proceso, ya que cada país tiene una situación diferente. Por ejemplo, mientras que en Francia los combustibles fósiles se llevan menos del 4 % de los créditos a la exportación, en países como Holanda o España los porcentajes pueden subir al 20-30 %.