Este Black Friday las marcas lo apuestan todo al verde, siguiendo la tendencia que marcan los consumidores e intentan hacerse con sus favores y con sus tarjetas de crédito, desde la bandera de la sostenibilidad y el cuidado por el planeta.
La última marca de gran consumo que se ha unido al Green Friday, es el gigante del mobiliario económico y fácil de colocar: Ikea.
Aunque el último viernes de noviembre tradicionalmente es en el que se producían la mayoría de las ventas antes de las navidades, con ofertas destacadas, lo cierto es que ahora se ha trasladado a muchas semanas antes y después de esa fecha, intentando fomentar un consumo, por los altos descuentos percibidos, que no siempre son verdaderos chollos.
Sin embargo, aquella parte de la sociedad que lo rechaza, por ser considera la fiesta del derroche, también tienen capacidad de adquisición y no son pocas las marcas que ven en ellos, otro target muy interesante, por su fidelización.
Y es en este punto donde Ikea se posiciona, comprará a sus clientes los muebles usados, aquellos que ya no tienen un futuro en sus hogares y van camino del punto limpio.
Ikea comprará nuestros muebles usados, para facilitar una segunda vida
En esta campaña, ofrecerán hasta un 50% más de valor en las tasaciones de muebles de segunda mano que entreguen los clientes mediante su servicio de recompra entre el 15 y el 28 de noviembre. Eso sí, a cambio recibirás una tarjeta de reembolso Ikea, con la que solo podrás comprar en sus instalaciones, una solución que no termina de ser verde.
Siempre podremos buscar espacios donde donar nuestros muebles a aquellas personas que realmente lo necesitan y no pueden adquirirlo, una solución que si es verde.
