Crear productos de manera sostenible es ya una prioridad para muchas marcas. Gracias al desarrollo y la investigación en el mundo de las impresoras 3D hacer ropa de forma menos perjudicial para el planeta está siendo posible.
De hecho, la empresa española ZEN Collection aboga por crear prendas a través de esta técnica ya que al digitalizar los patrones solo se utiliza el material necesario y así no se desperdicia nada. Se calcula que en un proceso de producción habitual se puede llegar a desperdiciar hasta el 30% de la tela.
Dos españolas, Ane Castro y Nuria Costa, comenzaron a investigar sobre moda del futuro cuando tomaron contacto con una impresora 3D en el departamento de wearables de TU/ e en Eindhoen University of Technology. Fue así como empezaron a jugar con diferentes tejidos para elaborar prendas con este tipo de tecnología. Tras un largo proceso consiguieron elaborar un tejido directamente sacado de máquina con las propiedades de un tejido convencional. El tejido está compuesto por un filamento flexible y biodegradable.
Todo el proceso de producción, desde el diseño hasta el resultado final, está centrado en que sea 100% sostenible. Por eso mismo también se reciclan los materiales de las prendas usadas fundiendo los plásticos en un filamento imprimible para poder crear nuevos artículos.
Además de las impresoras tambien utilizan bordadoras industriales con el objetivo de crear prendas sin costuras ni residuos. Esto es posible gracias a un nuevo sistema que han desarrollado en el que se elabora el patrón de prensas sin utilizar un tejido base. Además, trabajan con materiales flexibles como el TPU que hace que las prendas sean completamente funcionales y se les pueda dar un uso cotidiano como a cualquier otra prenda y que estos diseños no se queden solo para desfilar en pasarelas.
Otra de las ventajas que posee este tipo de producción es que la impresión 3D hace que los diseños puedan ser completamente innovadores. Y además, gracias a la tecnología que han conseguido desarrollar son capaces de combinar dos materiales diferentes que no tienen porqué tener las mismas propiedades en lo que a elasticidad y espesor se refiere.
Estas dos chicas son todas unas pioneras en lo que a la moda impresa 3D. Para este par de emprendedoras lo más complicado ha sido conseguir realizar prendas que se puedan usar diariamente con estas técnicas.
Por otro lado, las creadoras de ZEN Collection confían en que esta tecnología va a ser una solución más que factible para el problema que existe en la producción de moda.